Este producto se realiza en los siguientes departamentos de Perú:
Ica:
Existen bodegas como Tacama (fundada en 1889) y El Tabernero (fundada en 1897), cuyas instalaciones se prestan para visitas guiadas, degustaciones y otras actividades culturales.
Es importante mencionar que El Carmelo es una antigua hacienda convertida en hotel, la cual permite ver los procesos artesanales e industriales de la realización del pisco a sus huéspedes.
Lima:
Al sur de Lima, a tan solo unas dos horas sin tráfico, se encuentra la capital de la provincia de Cañete.
En este lugar hay alrededor de ocho bodegas que ofrecen recorridos a los turistas, así como también venta de sus productos a buen precio.
Moquegua:
A 18 horas de la capital peruana, esta ciudad del sur del país cuenta con más de 450 años de tradición pisquera.
En sus valles hay más de 18 bodegas que son parte de la ruta del pisco, pero no todas son aptas para visitas guiadas.
En estos paisajes destaca el cultivo de la uva Negra Criolla, cuyo pisco tiene aromas a pasto recién cortado y deja un sabor estructurado en la boca.
En Moquegua puedes encontrar bodegas muy antiguas como la Biondi, cuyo fundo de uva Italia es uno de los más grandes de Perú; o bodegas muy jóvenes como El Mocho, fundada en 1990 y galardonada con diversos premios.
Es importante señalar que en esta ciudad puedes visitar lugares como el Museo Contisuyo, los Geoglifos de Chen Chen, el Cerro Baúl, la Casa Mariátegui, entre otras atracciones. Además, no puedes dejar de probar los tradicionales dulces moqueguanos.
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